La postergación de tratamiento de los pliegos de ascensos de los militares Milani, Carena, Callejo y Erice decidida por el bloque del FPV, en la tarde del lunes 22 de julio, expresa simplemente la necesidad que tiene el gobierno de seguir ocultando las imputaciones por las cuales el General Cesar Milani no cuenta con aptitud suficiente ni calidad moral adecuada para el cargo de Jefe del Ejército Argentino.

Antes también las demoras y dificultades en facilitar la información necesaria para la toma de decisiones conforme a la responsabilidad constitucional y reglamentaria del legislador en el otorgamiento del Acuerdo, fueron en el mismo sentido. Entre las más graves, el ocultamiento de la Secretaría de DDHH de la Nación del expediente por el secuestro de Alfredo Olivera en La Rioja configura un injustificable encubrimiento del gobierno nacional a todos los argentinos.

El Bloque de Senadores de la UCR había rechazado su pliego ya en 2010 en ocasión de buscar su ascenso junto a la designación como subjefe del Ejército, a cargo del área de Inteligencia, por considerar que Milani ha inducido el cambio del principio de idoneidad por el de discrecionalidad impulsando la partidización de las Fuerzas Armadas.

Después de un exhaustivo trabajo de investigación, la UCR ha aportado elementos a las causas judiciales por Derechos Humanos por su presunta participación en la desaparición de personas en las provincias de Tucumán y La Rioja donde se desempeño durante la dictadura militar. Cuestiones que deben ser valoradas por un lado la justicia, pero sin lugar a dudas también por quienes otorgan el Acuerdo, y sobre los cuales, si el oficialismo lo hubiese permitido, el propio Milani podría haberse expresado en el Senado de la Nación.

Del análisis de las declaraciones juradas patrimoniales del General ha surgido una serie de inconsistencias que también deben ser evaluadas a la luz de un ascenso a tan alto cargo, sobre todo porque se pretende que el servidor público sea quien dirija toda la Fuerza.

Las mismas razones que hoy llevan al oficialismo a evitar el tratamiento del ascenso, sin lugar a dudas son las que justifican que la señora Presidente de la Nación, en su responsabilidad como Comandante en Jefe de las FFAA, releve inmediatamente al general Cesar Milani del cargo de Jefe del Ejército Argentino.

Mantenerlo al frente del Ejército demuestra el doble estándar en materia del DDHH del kirchnerismo, para quien si es funcional al proyecto no merece ninguna duda, aún cuando sobradas sospechas se ciernen sobre el militar en cuestión.

En esta ocasión, la UCR vuelve a demostrar su solvencia parlamentaria y su compromiso con los DDHH, la verdad y la justicia.

FUENTE:
WWW.SENADOUCR.GOV.AR