Así lo dispuso el congreso partidario que sesionó este sábado en Tala. La medida deja afuera a toda la última serie de fugas, fundamentalmente hacia el oficialismo urrikirchnerista, a nivel nacional, provincial y local.

El congreso provincial del radicalismo, que sesionó en Rosario del Tala con 197 miembros, aprobó una amnistía para los afiliados expulsados. 

La propuesta, que viene siendo una moción debatida en los últimos años, fue reimpulsada por el Movimiento Yrigoyenista Entrerriano y consiguió el aval de una amplia mayoría del cónclave, el primero después de la derrota de octubre. 

El concejal Miguel Rettore, consultado por Página Política respecto de los alcances de la decisión adoptada, precisó que alcanza a todos los afiliados que fueron expulsados hasta el 31 de diciembre de 2009. 

De este modo, quedaron fuera quienes expresaron de algún modo al radicalismo que acompañó al oficialismo K a nivel nacional, provincial y local. 

Se fija un plazo de 60 días, además, para que los expulsados interesados vayan a ratificar su condición de afiliados a la sede partidaria. 

“Me hubiese gustado una amnistía sin condicionamientos pero este es un paso importante que hemos dado en función de empezar a amigar el partido, de reconciliarnos entre los radicales para encarar un proceso de recuperación”, valoró el edil. 

El encuentro, además, abordó como tema importante el de la apuesta a la conformación de un frente electoral de cara al 2015 y en línea con lo que sucede a nivel nacional y en Buenos Aires, con la experiencia de UNEN.

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