En una nota de opinión en su sitio web, el titular de la UCR entrerriana y Diputado Nacional, Dr. Jorge D'Agostino, realiza un análisis de los acontecimientos acaecidos en este último tiempo y da por sentado quien se benefició con todo aquello.

La nota completa dice textualmente:

¿Qué podemos decir del año que está terminando en materia política? En Entre Ríos, la sociedad pudo elegir entre 5 listas y le dio un respaldo extraordinario al gobernador que sumó 46.6%. El apoyo recibido fue notable, teniendo en cuenta objetivamente el 25% de inflación anual, caos social, acuartelamientos policiales, deterioro del salario, aumento de la pobreza y de la inseguridad, por la profunda desigualdad que generó el modelo. 

Sin embargo, el votante eligió al gobierno, aún con todo este bagaje de pérdidas. ¿Por qué, si duele el bolsillo en cada compra, los delitos han aumentado, la educación ha empeorado y la salud no puede ser peor atendida, el narcotráfico se ha apoderado de los barrios en las ciudades entrerrianas, la sociedad sigue eligiendo a aquellos que gobiernan desde hace 10 años y que han debilitado a las instituciones y deteriorado la calidad de vida entrerriana? ¿Son mejores sus candidatos? De hecho no; porque los escondieron en la campaña para mostrar sólo al gobernador, que es el jefe absoluto y responsable total de lo que ocurre. 

De manera que el problema parece que está en otro lado. Yo no creo que los electores se confundan, ni estén comprados, ni se equivoquen, eso sería de una actitud de soberbia que no es propia de mi pensamiento. La sociedad no vota en su propia contra, sino que cada uno de los votantes, elige de lo que hay y listo. Los resultados definen luego las preferencias. 

En las preferencias, si dividimos en oficialismo (46.6%) y oposición (53.4%), la oposición gana. Ahora bien, una cosa es la representación del 46.6 % en 2 o 3 listas y otra muy distinta es sobre 5 listas compitiendo. 

Este cálculo le sirve al gobierno para analizar cuanto de la población está descontenta y corregir. A la oposición le sirve para entender definitivamente que el bipartidismo en Entre Ríos como sistema ha desaparecido. Para los opositores que piensan más o menos parecido el único camino es la concertación. 

Para la Unión Cívica Radical, un partido que hace un siglo disputa elecciones con el objeto de ganarlas y gobernar, este año ha sido bueno en lo nacional y malo en lo provincial. En el país la UCR ha recuperado hasta llegar a 5 millones de votos, en alianza o como lista 3, y eso nos reposiciona como la segunda fuerza del país. 

En Entre Ríos el campo opositor debe rever sus conductas: la UCR deberá pensar y analizar lo sucedido asumiendo las responsabilidades que le cabe a cada uno. Pienso que, a las veleidades de personajes famosos, a la terquedad de líderes de partidos minoritarios y a la incapacidad general de pensar la política entrerriana en términos estratégicos y de largo plazo, en el plano interno de la UCR se le suma un puñado de dirigentes que desde hace 10 años esperan escondidos que un correligionario levante cabeza, para bajársela a cascotazos, y así, es poco probable que haya buenos resultados. 

Cuando todos son responsables, nadie es responsable y en esa línea de pensamiento, ha trabajado de manera perversa el gobierno, echando la culpa a diestra y siniestra y cegándose sus propios ojos frente a la inflación, la pobreza, la falta de rentabilidad en el trabajo y el crecimiento exponencial de la droga y la inseguridad, para tener como mejor arma, el aumento sistemático de los impuestos, que recae claro, en los que trabajan. 

Sólo unos pocos ganan en este juego, y nunca son los más débiles sino los poderosos que mantienen el control para seguir siéndolo. Ha sido un mal año para los entrerrianos, y un gran año para el gobierno.

FUENTE:
JORGED'AGOSTINODIPUTADONACIONAL.BLOGSPOT.COM.AR