El presidente de la UCR dijo que se necesita un organismo para buscar y aportar pruebas a la justicia. Evitó hablar de una fórmula presidencial con el titular del FAP.

Le recordaron que el gobernador Daniel Scioli tiñó de naranja el verano de Mar del Plata. Le mencionaron las actividades que está llevando adelante el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, para posicionarse en el escenario nacional. Entonces el presidente de la UCR, Ernesto Sanz, se permitió un momento para la distensión. “Ellos podrán poner el anaranjado o el negro. Nosotros nos ponemos el celeste y blanco de la bandera argentina”, dijo, en alusión al color de la camisa que usó ayer, al igual que el el presidente del Frente Amplio Progresista (FAP), Hermes Binner, para recorrer el astillero Contessi en la calurosa tarde de Mar del Plata.

Sanz lanzó fuertes críticas al Gobierno. Hasta dijo que debería haber una suerte de Conadep (la comisión que investigó las desapariciones de personas ocurridas durante la última dictadura militar) para echar luz sobre la corrupción. “Después de todos estos años en que la corrupción se ha ensañado con nuestro país es necesario que el próximo gobierno ponga las cosas en claro y pueda determinar un castigo a quienes han lucrado con el Estado. Me gusta la idea de crear la Conadep de la corrupción. Es decir, un organismo que sea capaz de ayudar en la búsqueda de pruebas e investigaciones a la Justicia, que en definitiva es la única que puede avanzar institucionalmente”, explicó.

Acompañados por dirigentes radicales, socialistas y del GEN, Sanz y Binner decidieron sacarse una foto con tinte electoralista en el puerto, pero ninguno de los dos habló de una posible fórmula presidencial para 2015.

“Ni me veo ni me dejo de ver en una fórmula con Binner. No pasa por la cabeza ni de él ni mía. Primero estamos construyendo este frente, después vendrá el momento de pensar en las cuestiones personales y con todo gusto podría contestar qué voy a hacer yo de mi vida. Ahora, el desafío más importante que tengo es construir un espacio común”, dijo Sanz a LA CAPITAL.

Fue inevitable la consulta sobre el encuentro que, a la misma hora, mantenían en Olivos el ex vicepresidente Julio Cobos (UCR) y el senador porteño Fernando “Pino” Solanas (UNEN). “No hay nada raro. De manera paralela, han decidido juntarse y nos parece bien, productivo y positivo. Yo lo celebro, lo auspicio y lo apoyo. Todos aquellos encuentros que sirvan para la construcción de un espacio común bienvenidos sean. Ya vendrá el momento, cuando terminemos de construir este espacio, en que nos saquemos una foto conjunta”, respondió.

Aseguró, además, que no le preocupa que algunos intendentes radicales puedan saltar al Frente Renovador. “No nos preocupa en absoluto. La consideramos más una operación que se hace desde algunos sectores que pretenden vender humo y tapar sus propias debilidades. El radicalismo está muy sólido, muy firme. Los intendentes radicales de todo el país forman parte de un conglomerado que es un orgullo exhibir. Se ve que todo el mundo aprecia la capacidad de gestión, la honestidad, la decencia y la transparencia de los intendentes radicales”, marcó.

Fue crítico con los jefes comunales que ya forman parte del partido de Massa, pero evitó mencionarlos: “Los que se han ido son apenas un par de personas que ya habían tenido experiencia en esto, son reincidentes. El radicalismo contiene absolutamente a toda su gente. Y la contiene con la expectativa de ganar las elecciones de 2015″.

Irónico, el titular de la UCR sostuvo que lo del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, “fue un veranito”. Lo dijo a raíz de que las ruedas de prensa que realiza el funcionario cada mañana se limitarán a tres preguntas. “El Gobierno persiste permanentemente en el error. Y cuando aparece alguien que quiere traer un poco de oxígeno y aire fresco dura muy poco tiempo. Al instante vuelve todo a la normalidad”, disparó.

FUENTE:
SANTACRUZLAVERDAD.COM